Oaxaca, la tierra del mezcal, es un destino aclamado nacional e internacionalmente y no es para menos, ya que es uno de los estados de la República Mexicana con mayor diversidad cultural y abundantes recursos naturales. En esta tierra ancestral, llena de magia, hay una lista interminable de actividades por hacer y lugares que visitar.
Cuando hablamos de Oaxaca, hablamos de tradiciones, historia, artesanías, la Guelaguetza, gastronomía y por supuesto, de la bebida de los dioses, el mezcal, la suma de todo lo han convertido en uno de los mejores destinos para visitar.
En México hay alrededor de 132 Pueblos Mágicos y 6 de ellos están en Oaxaca. A continuación, te damos el Top 3 para que en una escapada de sólo un par de días los conozcas y disfrutes con las recomendaciones de hospedaje que complementarán la aventura perfecta en la tierra del
mezcal. Oaxaca es sin duda un must que tienes que visitar en algún momento de tu vida.
Capulálpam
A menos de 2 horas de la ciudad de Oaxaca, en la Sierra Norte, se encuentra este hermoso Pueblo Mágico.
El punto de partida ideal es el Centro Histórico de Oaxaca, en donde te recomendamos hospedarte en el Grand Fiesta Americana Oaxaca donde después de un desayuno de campeones en el restaurante La Distral disfrutando de su amplio menú de platillos típicos como los chilaquiles en mole amarillo con tasajo, tetelas rellenas de pollo o las imperdibles tlayudas con tasajo y el típico chocolate de agua, estás listo para iniciar tu roadtrip a Capulálpam.
En el corazón de una de las áreas naturales mejor conservadas de Oaxaca, Capulálpam es reconocido principalmente por sus tradiciones medicinales, en donde se encuentra el Centro de Medicina Indígena Tradicional, nacionalmente reconocido por sus técnicas medicina alternativa, usando hierbas, limpias y baños de temazcal, las manos mágicas de los curanderos zapotecos son una experiencia que no olvidarás.
No te puedes ir de este bello Pueblo Mágico sin antes visitar el Templo de San Mateo, que en su interior conserva un antiguo alfarje de madera del siglo XVII y sus retablos de los siglos XVIII y XIX, una de las colecciones más antiguas resguardadas en el estado de Oaxaca.
