Han pasado cerca de 17 meses desde que los niños y las niñas pisaron su escuela por última vez. Son más de 500 días en que no han jugado con otros niños y no saben cuándo podrán volver a hacerlo. Esa incertidumbre ha afectado tanto a padres como hijos, pero afortunadamente, se pueden realizar acciones que promuevan el bienestar familiar.
Según una encuesta realizada por Save The Children a más de 6,000 menores en distintos países, se identificó que uno de cada cuatro niños padece ansiedad por el confinamiento, y muchos de ellos padecerán trastornos psicológicos permanentes.
Un niño constantemente estresado no estará enfocado en aprender. De acuerdo con la investigadora del Hospital Infantil de México, Gina Chapa Koloffon, los menores se ven afectados por perder oportunidades de socialización y esto les dificulta aprender a convivir, compartir, y afectan sus habilidades de lenguaje, motrices y recreativas.
Con información de Child Mind Institute, designar tiempo para practicar actividades de mindfulness en familia, puede ayudar a bajar los niveles de ansiedad y estrés, y al mismo tiempo, desarrollar habilidades de inteligencia emocional en los niños. Puede ser una clase de yoga, escuchar una meditación guiada, caminar en silencio y enfocarse en los olores, colores, sonidos, etc. A través del mindfulness podemos lograr un cambio significativo en nuestras vidas, ya que nos ayuda a abrir los ojos a lo que está aquí, frente a nosotros, a nuestro alrededor y dentro de nosotros.
Es importante cultivar diferentes virtudes en nuestro interior como compasión, paciencia, gratitud, perdón y vitalidad. Aquí es donde debemos comenzar porque es lo que nos proporcionará el sentido más profundo de paz, equilibrio y presencia en medio de las exigencias de la vida moderna.
Los beneficios potenciales en nuestros hijos de nuestras propias prácticas de atención y autocuidado incluyen:
- Mejor comunicación con nuestros hijos.
- Tendencia reducida a reaccionar con impaciencia o agresividad.
- Mayor conexión y vínculo entre padres e hijos.
- Mejora de las actitudes de los padres
- Mejora en problemas de comportamiento.
- Reducción del estrés tanto para padres como para niños
El objetivo de esto no es ser padres perfectos, sino mejorar de forma natural y sutil la armonía y el bienestar de cada individuo y por lo tanto, de toda la familia.
El Dr. Leo Rastogi te comparte una serie de consejos que te pueden ayudar a encontrar el balance y convertirte en un mejor apoyo para tus hijos y transmitirles una sensación de bienestar:
- Recuerda respirar
La respiración es una de las principales herramientas de la atención plena y meditación, y por una buena razón: siempre está disponible para nosotros. Podemos reducir el estrés mediante la respiración consciente o profunda.
- Aclara tus valores
Tener claros nuestros valores fundamentales puede ayudarnos a establecer prioridades y eliminar las cosas en nuestras vidas que solo agregan una presión innecesaria.
- Prioriza el sueño y el descanso adecuado
Cuando se trata de estrés y fatiga como padre, el descanso debe ser una prioridad. Si tenemos un recién nacido o un niño que experimenta pesadillas, no siempre es posible dormir ocho horas completas; sin embargo, podemos acostarnos un poco más temprano, apagar los aparatos electrónicos veinte minutos antes de lo habitual, tomar un té relajante o tomar un tiempo para meditar antes de acostarse puede ser muy útil.
- Medita
Además, la meditación es una herramienta invaluable para alejarnos del mundo que nos rodea y reconectar con nuestro interior. La meditación ofrece a los padres una variedad de beneficios, que incluyen ayudar a reducir la respuesta al estrés, mejorar el sueño, mejorar la resiliencia y mejorar la forma en que manejamos nuestras emociones. La app de ayam te puede ayudar a vivir esta práctica de forma sencilla, ya que cuenta con distintas meditaciones guiadas que te ayudarán a descubrir la mejor versión de ti mism@.
- Busca apoyo adicional cuando lo necesites
Por último, es importante tener presente que no es necesario que hagamos esto por nuestra cuenta. Ya sea que nos comuniquemos con nuestra pareja, un amigo cercano, un miembro de la familia o los servicios de un profesional de la salud para obtener apoyo, es crucial encontrar una red en la que apoyarse.
Podemos ver estos tiempos inciertos como una oportunidad para fortalecer los lazos familiares, conocer más a nuestros hijos y sobre todo, escucharlos y prestar atención a lo que necesitan. Poco a poco comenzaremos a incorporar de forma natural nuevas formas de ser: nuevas formas de criar con presencia, atención y un corazón abierto y compasivo.
*Acerca de Ayam: Ayam es una comunidad de self-care and wellbeing. Ofrece herramientas prácticas y simples, que acompañan a las personas a desarrollar técnicas de self-care y wellbeing, para vivir con mayor calidad y más plenitud, y navegar el caos de la vida moderna. El contenido está desarrollado de la mano del Dr. Leo Rastogi y expertos de la salud, psicólogos, psiquiatras, médicos, científicos y líderes en meditación y mindfulness; todo bajo las últimas investigaciones en neurociencia y neurobiología para producir resultados de bienestar óptimos en el menor tiempo posible. Más información en ayam.world
*Acerca de Dr. Leo Rastogi: Leo es co-fundador, guía mentor de ayam, autor de libros, emprendedor, filósofo, mentor de liderazgo y científico espiritual. Alumno de Harvard Business School y cuenta con un doctorado en liderazgo por la Universidad de Salford. Leo pasa su tiempo libre viajando por el mundo y estudiando la sabiduría de diversas culturas, filosofías y religiones del mundo, lo cual, sintetiza en sus conferencias, programas de formación y compromisos de coaching. Más información en leorastogi.com