- Desde una perspectiva neurocientífica, las pesadillas ocurren durante el sueño REM, por sus siglas en inglés, Rapid Eye Movement.
- Trabajar en una mejor higiene del sueño, las recomendaciones de los expertos de Emma – The Sleep Company.
Todos soñamos sobre castillos, batallas, campos de flores, amor, seres queridos, de lo mundano, de lo cotidiano, lobos o chozas en el bosque. Sí, los sueños son tan diversos y variados como las personas que lo viven, en ocasiones es una imagen relajante como el agua cristalina y el sol, o de pronto estás cayendo al precipicio luego de correr porque alguien te persigue.
Cuando despertamos surgen miles de preguntas sobre lo que acaba de pasar, a veces recordamos fragmentos que nos hacen dudar quién estaba en el sueño o dónde estábamos, o surge la incógnita de si lo que conocemos como pesadilla, realmente pasó, pero ¿qué quieren decir?, ¿revelan secretos ocultos de nuestra psique?, ¿son una puerta desconocida de nuestra mente y alma? Los expertos de Emma – The Sleep Company comparten su conocimiento para entender lo que sucede cuando dormimos y te da tres tips para mejorar tu higiene del sueño.
Desde una perspectiva neurocientífica, podemos diferenciar entre tipos de sueño durante las fases NREM (ondas lentas o No REM) y REM (Movimiento Ocular Rápido). Los investigadores comparan un sueño durante NREM con una fotografía, es decir, los sueños suelen ser más cortos, menos estructurados, más débiles y menos emocionales.
Los sueños REM se comparan con una película en la que el soñador es el personaje principal. En otras palabras, se cree que el sueño REM incluye la activación e interacción complicadas de muchas regiones del cerebro, lo que da como resultado una experiencia onírica más sofisticada. Estas imágenes mentales multimodales surgen espontáneamente durante el sueño y normalmente se estructura como una narración.
Cuando dormimos, pasamos por diferentes fases del sueño que se caracterizan por la presencia o ausencia de movimientos oculares específicos conocidos como Rapid Eye Movement (REM). De ahí que las fases del sueño se dividen en N-REM y REM, es en esta última en la que se presentan las pesadillas y los sueños lúcidos.
Existe un vínculo significativo entre el sueño REM y las pesadillas. Los sueños más aterradores ocurren durante el sueño REM. La mayoría de las enfermedades y medicamentos que alteran el REM, afectan esta fase y, por lo tanto, el sueño. Como tal, soñar puede verse impulsado por varias parasomnias relacionadas con REM (trastornos relacionados con el sueño disruptivo).
“Soñar es importante para procesar emociones que tuviste durante el día y contribuye a la consolidación de recuerdos con gran carga emocional como un mecanismo de resolución de problemas que estimula el mundo real cuando dormimos. Es importante para nosotros obtener la cantidad adecuada de buen sueño, para poder tener una buena experiencia de sueño que comienza cuando entramos en el sueño ligero al sueño profundo hasta que alcanzamos la etapa fundamental del sueño REM, cuando nuestro cerebro se vuelve más activo en el procesamiento de experiencias emocionales no resueltas de la vida de vigilia que contribuyen fuertemente a la consolidación de la memoria emocional”, asegura la Dra. Verena Senn, Neurobióloga y Jefa de Investigación del Sueño en Emma – The Sleep Company.
Por esas razones, Emma – The Sleep Company te comparte tres tips para mejorar tu higiene del sueño y sobre todo disminuir las pesadillas nocturnas. – Duerme lo suficiente. Dormir entre 6-8 horas es el tiempo ideal de sueño para los adultos, de esta manera procesarás de la mejor manera episodios difíciles e incluso traumáticos experimentados durante el día.
– Higiene del sueño. ¡Prepárate para dormir! Duerme en una habitación fresca y oscura, limita la exposición a la luz azul de los dispositivos electrónicos antes de dormir, escuchar música o consumir estimulantes como el café.
– Trabaja en tu sistema nervioso parasimpático, que inhibe las respuestas de lucha o huida y aumenta la sensación de relajación. La investigación científica ha demostrado que los ejercicios de respiración y meditación antes de dormir pueden ayudar significativamente a lograr este objetivo. Además, puedes intentar usar productos que han demostrado científicamente que aumentan la sensación de relajación, como mantas de gravedad o aplicaciones de meditación disponibles en varias tiendas digitales, o simplemente un baño con agua tibia.