Consiente a tu paladar con este delicioso platillo tradicional que forma parte
de la riqueza gastronómica nayarita
Aunque su origen se remonta a varios siglos atrás, con el paso del tiempo
se perfeccionó para fusionar el sabor de dos culturas
El estado de Nayarit posee una gran
riqueza gastronómica que incluye platillos únicos que mezclan la tradición de sus
pueblos originarios con el inigualable sabor, sazón e ingredientes del Pacífico
mexicano. Una de estas delicias es el tlaxtihuilli, un platillo de alta cocina de origen
prehispánico que contiene atole de maíz, chile y camarón, un auténtico manjar que
sólo puede ser disfrutado en tierras nayaritas.
También conocido como tixtihuil, tatishuile o “atole de camarón”, esta sopa/caldo
es una joya culinaria representativa de la Isla de Mexcaltitán, un pequeño poblado
pesquero colorido y tranquilo que pertenece al municipio de Santiago Ixcuintla.
Se cree que la receta original fue creada hace siglos por el grupo indígena
conocido como “Los Totorames”, que eran amantes del mezcal y que después de
una buena fiesta o celebración trataban de suavizar la resaca con este platillo por
el atractivo sabor que le daba el chile y limón.
Tras la Conquista, su preparación fue enriquecida con otros ingredientes traídos
del viejo mundo como las especias. Actualmente los ingredientes más usados en
su elaboración son masa de maíz, chile cascabel, pasilla o de árbol; jitomate, ajo,
cebolla morada, orégano, comino, pimienta, aceite y sal al gusto. La manera más
fácil de probar esta joya culinaria es visitar la “cuna de la mexicanidad” o los
restaurantes de todo el estado, especialmente los ubicados en las costas
nayaritas.
También se puede disfrutar de su sabor preparándolo en casa. Para esto se
necesita un kilo de camarones, tres chiles pasilla y uno de árbol (todos sin
semillas), media cebolla morada, tres dientes de ajo, un jitomate, media taza de
masa para tortillas, una cucharada de aceite, una pizca de orégano y pimienta, y
sal al gusto.
El primer paso es cocinar los chiles, ajo, tomate y un cuarto de cebolla en agua.
Cuando estén listos, se licuan junto con la masa para tortillas, hasta obtener una
pasta espesa parecida al atole. El segundo paso es hervir los camarones en 1 litro
de agua con el resto de cebolla morada, sal y pimienta al gusto. Se dejan cocinar
hasta que los mariscos obtengan un color naranja-rosado. Es necesario guardar
de siete a 10 cabezas de camarón ya cocidas, a las que se les deben quitar los
ojos y cortar las puntas. Después se licuan con dos tazas de agua o con el propio
caldo de la cocción anterior.
Luego de esto, hay que calentar un poco de aceite en una olla y añadir la mezcla
del primer paso y el licuado del segundo para obtener un caldo espeso. En este
punto se agrega un poco de sal y pimienta al gusto y se deja hervir durante unos 5
minutos. Cuando este tiempo ya pasó, se agregan los camarones sazonados y
precocidos, junto con el orégano y se deja hervir durante otros 5 minutos.
¡Listo! El exquisito tlaxtihuilli está listo para saborear. Lo recomendable es servirlo
en platos hondos acompañado de jugo de limón, tortillas hechas a mano o con
alguna salsa picosita.
Este manjar caldoso se une a la extensa oferta gastronómica de la entidad, una
probada a delicias marinas como el pescado zarandeado, el ceviche de botete o
los camarones a la cora. Gracias a esto, la cocina de Nayarit forma parte de las
“25 razones por las que Nayarit es el destino para visitar este 2025”.
Para más información visita:
https://visitnayarit.travel/
